martes, diciembre 06, 2005

Aquí, sí hay plata

Crean una ‘supermontaña’ de nieve artificial en el golfo Pérsico(Tomado de Portafolio)

El descomunal proyecto, inaugurado el pasado fin de semana, cubre con 6.000 toneladas de nieve una superficie 22.500 metros cuadrados.
La nieve ha caído por primera vez en la ciudad de Dubai, una urbe creada en el desierto arábigo, pero no ha sido culpa del temido cambio climático, sino de la primera estación artificial de esquí construida en Oriente Medio.
La estación cuenta con todos los detalles necesarios para que los visitantes se sientan en medio de los Alpes sin haberse movido del Golfo Pérsico.
Empinadas pistas, telesillas, nieve lanzada desde cañones y chalets donde los esquiadores pueden sentarse al lado de la lumbre a beber una taza de chocolate caliente o comer queso derretido como si estuvieran en Sant Moritz.
Ski Dubai, nombre del colosal proyecto abierto esta semana al público, se jacta, además, de ofrecer a los más aventureros la primera ‘pista negra’ artificial, solo apta para los esquiadores más expertos.
Para quienes no necesiten de emociones tan fuertes, el complejo posee otras cinco pistas de diferentes dificultades y longitud, la más larga de 400 metros.
Además cuenta con una zona para snowboard y el parque interactivo de nieve más grande del mundo.
La montaraz recreación, similar a las montañas suizas, cubre una superficie 22.500 metros cuadrados -el equivalente a tres campos de fútbol y está cubierta todo el año con 6.000 toneladas de nieve.
Levantado en forma de tubo, la estructura -de 85 metros de alto, es decir 25 pisos se proyecta sobre una de las arterias principales de Dubai, la avenida Sheik Zayed.
En ella, el sol brilla con intensidad y la temperatura invernal ronda los 30 grados centígrados.
En esta época del año, los automovilistas aún tienen que encender la refrigeración de sus coches y los trabajadores de los cientos de edificios en construcción no dejan de limpiarse el sudor de sus frentes.
La manga corta y los vestidos de lino, algodón e hilo forman aún el atuendo de la mayoría de los visitantes del centro comercial Emiratos, que alberga la faraónica estructura.
Otros, sin embargo, se pasean con chaquetas termales alquiladas en la misma estación de esquí, entusiasmados con el capricho y con las narices rojas por el frío.
La mayoría son expatriados que trabajan en este excéntrico emirato, y el resto, ricos locales con una curiosa estampa.
Bajo sus anoraks negros, sobresalen las tradicionales y largas túnicas blancas, que cubren las botas de nieve.
Una vez finalizada la demostración, la estación cierra sus puertas y el frío ártico menos ocho grados centígrados se apropia de las pistas para mantenerlas como los picos acostumbrados a las nieves perpetuas. En la oscuridad de la noche, un avanzado sistema de frío produce alrededor de 120 toneladas de nueva nieve en 24 horas.
"Es nieve de verdad lo que creamos", afirma el director Ejecutivo de MAF Investments, Francois de Montaudouin, empresa propiedad del multimillonario emiratí Mayid al-Futtaim, dueño de Ski Dubai y el resto del centro comercial.
"Parece que sea lluvia pero realmente es nieve. Una visita a Ski Dubai será como pasar un bonito día en las montañas, con la ventaja de que las condiciones serán perfectas en todo momento", dijo Montaudouin.
La extravagancia, una de las 15 estaciones artificiales cubiertas de esquí que existen en todo el mundo, tiene capacidad para acomodar a unas 1.500 personas y espera recibir alrededor de 50.000 visitantes al año.
La construcción de este proyecto ha sido toda una proeza de la ingeniería, hasta el punto de que el proceso ha sido filmado por el famoso canal de televisión estadounidense Discovery Channel, que ya prepara un documental. Y es que Dubai, uno de los siete reinos que componen la rica federación petrolera de Emiratos Arabes Unidos, ha convertido en hábito hacer posible lo imposible.